En una acción sin precedentes, el Gobierno de México extraditó este jueves a 29 personas privadas de su libertad a Estados Unidos, todas ellas vinculadas con el crimen organizado y el narcotráfico. La operación se llevó a cabo en el marco de los acuerdos de cooperación internacional y bajo la presión de la administración estadounidense para intensificar la lucha contra el tráfico de fentanilo. 
Entre los extraditados destaca Rafael Caro Quintero, fundador del Cártel de Guadalajara, buscado por el asesinato del agente de la DEA Enrique Camarena en 1985. Caro Quintero fue recapturado en 2022 y su entrega a las autoridades estadounidenses representa un hito en la colaboración bilateral en materia de seguridad. 
Además de Caro Quintero, fueron entregados Miguel Ángel Treviño Morales, alias “Z-40”, y su hermano Omar Treviño Morales, alias “Z-42”, exlíderes del cártel de Los Zetas, conocidos por su extrema violencia. Ambos enfrentan cargos por tráfico de drogas y otros delitos en Estados Unidos. 
La operación incluyó el traslado de los reclusos desde diversos centros penitenciarios mexicanos al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, desde donde fueron enviados a diferentes ciudades estadounidenses, entre ellas Chicago, Houston, Nueva York y Phoenix. Las autoridades mexicanas informaron que el proceso se realizó sin incidentes y bajo estrictos protocolos de seguridad. 
Esta medida busca demostrar el compromiso de México en la lucha contra el narcotráfico y responde a las amenazas de la administración Trump de imponer aranceles del 25% a las exportaciones mexicanas si no se intensificaban los esfuerzos para frenar el flujo de fentanilo hacia Estados Unidos. Con estas extradiciones, se espera fortalecer la cooperación bilateral y evitar la implementación de dichas sanciones comerciales. 
